Portada
Las municipalidades del país frecuentemente tienen problemas en la recaudación del impuesto único sobre inmuebles (IUSI). Esto se deriva de diferentes problemáticas sociales, económicas y políticas. El impuesto del IUSI se calcula identificando el valor fiscal del inmueble, al que se le aplican las tasas establecidas en el artículo 11 de la Ley del Impuesto Único Sobre In muebles.
Los expertos indican que, entre algunas de las problemáticas que enfrentan las municipalidades está la resistencia de los vecinos, muy probablemente por temas de corrupción. Además, comentan que los alcaldes no quieren ser rigurosos en el cobro, pensando en una posible reelección.
Mario Rodríguez, analista del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos (Ipnusac) indicó que si los vecinos hipotéticamente debieran Q60 millones por pagos del IUSI a la comuna capitalina a él le parecería una suma muy baja. Esto por la magnitud de la ciudad y de las construcciones que hay en ella. Indica que una de las principales problemáticas es que los inmuebles no reflejan el valor de mercado de los bienes.
“Hay que resaltar que para las municipalidades el IUSI es uno de los principales ingresos y la gente no asume la responsabilidad de pagar los impuestos. Luego vemos centros comerciales que pagan valores similares a una casa de colonia residencial. Hay un poco de injusticia en ello, lo cual ocasiona que las personas estén reacias al pago”, comentó el analista.
Monto real de la deuda
La redacción de este periódico solicitó conocer la cantidad de inmuebles en mora y a cuánto asciende la deuda, pero la información fue negada por parte de la Municipalidad de Guatemala. Ante ello, el analista indica que esto demuestra la falta de transparencia por parte de la comuna capitalina.
“Creo que el cobro ahora es muy sistematizado, ese dato lo pueden tener inmediatamente. Pero considero que el desglose puede mostrar las injusticias en el pago. Estas son las grandes contradicciones que puede tener el cobro del impuesto y eso se refleja en la poca transparencia que hay”, resaltó Rodríguez.
Otros de los factores que afectan la recaudación es la falta de mercadeo de este impuesto. “Las municipalidades deben comunicar el beneficio de pagar, ya que en toda Guatemala hay muy poca cultura tributaria. Cuando hay casos de malversación de fondos, los ciudadanos encuentran el pretexto ideal para no efectuarlo. Por lo que las autoridades deben ser trasparentes en el uso de los dineros municipales”, resaltó Carlos González, investigador de Asociación de Investigación y Estudios Sociales (ASIES).
José Cuellar indica que no paga el IUSI, porque aún se encuentran en espera de la notificación que le indique si su propiedad pertenece a la jurisdicción de Santa Catarina Pinula o a la Ciudad de Guatemala. Mientras que Josué Palomo, vecino de la colonia Castillo Lara zona 7, comentó que desearía ver reflejado el pago de su impuesto en el recapeo de las calles y avenidas de la colonia.
De conformidad con el artículo 25 de la Ley del Impuesto Único Sobre Inmuebles, los contribuyentes que no efectúen el pago en la forma y plazo previsto deben pagar una multa equivalente al 20% del monto que hubiesen dejado de pagar.
El objetivo primordial del IUSI es el de proporcionar recursos económicos a las municipalidades del país, como un ingreso fijo que les permita llevar a cabo las diferentes atribuciones. Esto de conformidad con la Ley del Impuesto Único Sobre Inmuebles, que prevé que los fondos obtenidos por la recaudación de este tributo sean asignados a las municipalidades, en su totalidad, cuando éstas lo administren, y cuando sea el Ministerio de Finanzas Públicas, les corresponderá el 75%.
¿Cómo fortalecer el proceso de pago?
Carlos González, aseguró que idealmente, el IUSI debería sostener la inversión en infraestructura de las comunas. Según su propuesta para optimizar la recaudación y el uso de los recursos del IUSI publicado por ASIES, en diciembre del 2015. Como parte de la política de descentralización del sector público desde 1998, la recaudación del impuesto se ha trasladado hacia las municipalidades que lo solicitan. En la medida en que estas han demostrado que cuentan con la capacidad técnica y administrativa para hacerlo. También cuentan con el apoyo y asesoría de la Dirección de Catastro y Avalúo de Bienes Inmuebles (DICABI), del Ministerio de Finanzas Públicas (MINFIN).
Según González, las municipalidades deberían realizar auditorías de campo para establecer si el catastro municipal cuenta con información actualizada de los inmuebles en su jurisdicción, para elevar la recaudación.
“Creo que el IUSI es un impuesto útil, pero que requiere ser manejado con más interés por las propias autoridades. Es una fuente importante de ingresos al patrimonio municipal en miras de hacer obra de inversión, no para incrementar los gastos de funcionamiento y contratación de empleados”, adhirió el investigador.
Además, las comunas podrían instalar sucursales de las tesorerías municipales en aldeas lejanas, podrían fomentarlo mostrando con fotografías las obras en que es empleado el dinero. Además, instalando vías electrónicas de pago, gestionando con bancos del lugar o haciendo llegar el recibo conjuntamente con los recibos de los servicios de agua o energía eléctrica”, indicó.
“También podrían hacer loterías, como hacia la superintendencia de administración tributaria (SAT). Daban premios con el número de comprobante por estar al día en sus pagos”, finalizó González.
