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El talento de Stefania se aprecia cada vez que sube al escenario a interpretar el papel de villana. Es la más pequeña de la familia, pero a sus 11 años de edad, ya tiene la suficiente rudeza para ser la mala dentro de una obra.
A los cinco años su familia descubrió que tenía el talento para la actuación, y gracias a su tío se involucró en el maravilloso mundo del teatro y la actuación.
“De niña me di cuenta que era muy loca y creativa, no le tenía miedo a nada. Fue mi tío quien me ofreció participar en teatro. Con Thriambos Producciones ya he participado en cinco obras y un cortometraje. Actualmente soy parte de la obra El Príncipe Encantado”, explica Stefania.
Una vida normal con superpoderes
La pequeña actriz está en sexto año de primaria, estudia en el Colegio Alemán y en su tiempo libre disfruta del fútbol y de salir con sus tres mascotas.
“Llevo una vida normal; soy la hermana menor, voy a la escuela, tengo que hacer tareas y me considero igual a los demás niños de mi edad. Solo tengo superpoderes cuando interpreto personajes dentro de la obra, entonces me convierto en malvada y puedo hacer desaparecer cosas, o hechizar a los demás personajes. Eso es lo que disfruto del teatro, jugar con la imaginación y vivir otras realidades, es algo que a cualquier niño se le facilita”.
Si quieres conocer de cerca el talento de esta pequeña actriz, puedes verla en la obra escrita por el guatemalteco Milton González. La puesta en escena narra la historia de dos príncipes que fueron separados al nacer. Un día, el destino los une mientras buscan a una princesa. La obra se presenta en el teatro Dick Smith (IGA) los domingos a las 11:00 horas y estará disponible hasta el 23 de marzo.
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