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María Inés Castejón es maestra certificada de yoga para adultos y niños, empresaria y fundadora de Pure Yoga and Wellness Space y madre de trillizos.
Marinés, como le gusta que le llamen, lleva más de 15 años de practicar yoga y 12 de enseñarla, hoy cuenta cómo este ejercicio le ayuda a ser una mujer emprendedora, servicial y madre amorosa.
¿Qué significa el yoga en tu vida?
Es estar completamente presente, unión de cuerpo, mente e interior. A lo largo de mi vida ha significado muchas cosas, dependiendo de lo que vivo. Cuando comencé a practicar yoga, significaba alivio, porque inicié a raíz de un padecimiento de espalda. En otros momentos fue aceptación, comprometerme con mi crecimiento, observarme y no juzgarme. También fue lucha contra la infertilidad, ya que pasé 8 años buscando quedar embarazada.
Además, ha representado liberación, tuve un momento con mucho trabajo, y no disfrutaba lo que estaba haciendo, practicar yoga es el ancla de quién soy, para no perderme en lo que estoy haciendo. Me ha ayudado tanto física como emocionalmente, encontré esa conexión que necesitaba.
¿En qué momento deseaste ser maestra?
Cuando realice mi primera certificación de Teacher Training no lo estaba haciendo para ser maestra, sino para expandir mis conocimientos, y cuando la recibí ¡me encantó! Para poder ser maestro, primero debes experimentar el proceso en ti mismo.
¿Qué te motivó a fundar Pure Yoga?
Como empresaria siempre he tenido el espíritu de poner empresas que sean para el bien. ¿Qué me motivó? Ayudar a los demás, y que la gente pueda ver el yoga como yo lo veo, que experimenten su efecto no solo en el cuerpo, sino también en el ser.
¿Por qué buscan las personas esta práctica?
Puede ser por lesiones, necesitan un ejercicio constante que acondicione músculos y que sea de bajo impacto. También porque está de moda. Hay gente que viene por duda, otros porque ya practican y quieren continuar, o por bajar de peso. Cuando estamos en la práctica vemos hacia dentro, cosas que nos gustan y cosas que no, por ejemplo nuestros errores, y esas son oportunidades de ser mejor y crecer.
¿El yoga es para todos?
Es para todos los que tengan voluntad, niños, adolescentes, adulto mayor, incluso embarazadas, porque tiene las modificaciones necesarias para practicarlo.
¿Una experiencia que haya marcado tu vida como maestra?
Una de las más gratificantes como maestra de yoga, es que al empezar a dar clases para niños, salí de mi zona de confort. Al principio era diferente, yo traía mi clase planificada y los niños venían revoltosos, o mi clase era para saltar y reír, y un niño traía una situación que nos llevaba a algo muy diferente. Me inspira muchísimo por la espontaneidad.
En particular tuve un alumno, mi experiencia con él fue maravillosa, pude ver cómo era cuando vino y cómo cambió, era un niño más contento y seguro de sí mismo.
