Esta construcción, inaugurada el 22 de marzo en el zoológico La Aurora, es el proyecto más relevante en los 93 años de historia de este recinto y es una réplica a escala de la pirámide guatemalteca Danta, la más alta de Mesoamérica.
El presidente de la Asociación Guatemalteca de Historia Natural (entidad administradora del parque desde el año 1963), Pedro González, explicó que el recinto, de 1 mil metros cuadrados y con 50 terrarios, alberga a 433 ejemplares distintas de reptiles, anfibios, arácnidos e insectos de 81 especies distintas.
Esta pirámide tiene 15 metros de altura (un 20 % de las dimensiones reales de La Danta) y su parte interna está inspirada en cuatro bosques del país: el bosque tropical de la selva petenera; el bosque muy húmedo tropical de Monterrico o Río Dulce; el nuboso de Coban; y el seco de Huehuetenango, del oriente de Guatemala.
El nombre, agregó, deriva del idioma maya, pues en este Kan significa serpiente y reino Kan es la región del norte de Petén, donde se encuentra el Mirador, donde está ubicada La Danta.
De los más de 400 ejemplares que conforman este espacio muchos han sido rescatados y otros forman parte del hábitat guatemalteco, entre los cuales destacan el heloderma, que se encuentran en grave peligro de extinción; la famosa barba amarilla, las víboras de árbol y zumbadoras, entre otros.
El reino Kan y sus reptiles pretende ser además un espacio para educar a la población sobre estos animales, los problemas de extinción que enfrentan y ofrecer información para crear conciencia y que las personas no compren estas especies, ya que no son aptas para ser mascotas.
González aseguró que el zoológico La Aurora es un “pulmón” importante de Ciudad de Guatemala y uno de los quince mejores de toda América y este nuevo herpetario uno de los mejores de la región y del mundo. EFE
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